
Jean-Luc Mélenchon; Emmanuel Macron; Marine Le Pen; François Fillon
En Francia, de los 11 candidatos a la presidencia, sólo cuatro tienen posibilidades de ganar el 23 de abril y pasar a la segunda vuelta del 7 de mayo. El candidato oficial del partido socialista, Benoit Hamon, con apenas 9% en las encuestas, aparece excluido del grupo. De acuerdo a las encuestas, el centrista Emmanuel Macron tendría entre 24% y 22%; la ultraderechista Marine Le Pen tiene entre 23% y 22%; el derechista Francois Fillon entre 21% y 19,5% y el izquierdista candidato de la Francia Insumisa Jean-Luc Mélenchon entre 19,5 y 18%. Como los resultados se inscriben en el margen de error todo puede suceder. Para aumentar la tensión, recuérdese que las elecciones que se realizan bajo el Estado de Emergencia en vigor desde el 14 de noviembre de 2015.
Las cifras varían según las encuestas, pero ni siquiera pouede descartarse al candidato de la Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon. El periódico Le Monde califica la indecisión como la opción favorita a pocos días de la elección. Algunos estiman que el 33% de los electores franceses no ha tomado una decisión definitiva. Todos temen hasta en vaticinar para quien (Fillon ó Le Pen) iría el voto oculto. Tampoco quién ganará el voto indeciso cortejado por Macron o Mélenchon en los últimos días.
Esta campaña inédita corrobora el desplome de los bloques tradicionales de la derecha y la izquierda francesa están en crisis. Los resultados del domingo pueden abrir un nuevo periodo.
El Centrista Emmanuel Macron (En Marcha)

El candidato ni de izquierda, ni de derecha, Emmanuel Macron
Emmanuel Macron es quien tiene más posibilidades de ganar en la primera y la segunda vuelta. Tiene un recorrido inédito para la política francesa donde generalmente los candidatos presidenciales son probados en varios puestos electivos antes de presentarse a la presidencia. Fue ex gerente del Banco Rothschild, fue ministro de economía del saliente presidente Francois Hollande. Macron es el más joven candidato y dice representar el relevo, la nueva generación. Se declara ni de izquierda ni de derecha pero ha recibido el apoyo abierto de socialistas. El ex primer ministro y derrotado candidato presidencial del partido socialista Manuel Valls le dio abiertamente su apoyo. El mismo presidente Hollande le apoya embozadamente negándole el apoyo al candidato oficial del Partido Socialista, Benoit Hamon.
Candidato de la continuidad del socialismo al estilo Hollande, Macron es una novedad centrista. Algo visto muy ocasionalmente en un país donde el clivaje siempre se dio entre izquierdas y derechas desde que la Revolución Francesa inventara esa descripción del paisaje político.
En 2016, Macron lanzó el movimiento En marche. Su programa toma reivindicaciones de la derecha tradicional y del socialismo al estilo del saliente presidente Francois Hollande. Es el único candidato que defiende abiertamente la Unión Europea y la globalización. Como el derechista Francois Fillon, Macron promete reducir 120 mil empleos en la función pública (menos que los 500 mil que promete Fillon). Como Mélenchon, Macron mantendrá el derecho de suelo para atribuir la nacionalidad francesa a hijos de inmigrantes (Le Pen propone suprimirlo y Fillon, endurecerlo).
La ultraderechista Marine Le Pen (Frente Nacional)

Agresión con flores contra la candidata ultraderechista Marine Le Pen
A una semana de la primera vuelta, todo indica que la derechista Marine Le Pen candidata presidencial del Frente Nacional pasaría a la segunda vuelta presidencial (Kantar Sofres-OnePoint le da 23%). Esa posible victoria, ha hecho correr mucha tinta pero ninguna encuesta indica que tenga posibilidades de ganar la presidencia francesa en la segunda vuelta. Hasta Mélenchon le ganaría a Marine Le Pen en caso de ir ambos a la segunda vuelta. Lo más probable es que se repetiría la derrota sufrida por su padre frente a Chirac en 2002.
Además su campaña se vio afectada por las revelaciones de que usó ilegalmente dineros de la Unión Europea (donde es diputada) para financiar su partido. Aparece tan mezclada en la corrupción como los políticos tradicionales. Las encuestas indican que hay un alto nivel de rechazo a sus políticas racistas. Es así como la afectó una declaración en la que banalizó el rol de Francia en el envío de judíos a los campos de exterminio en Alemania. Ello actualizó el racismo del Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen, que ella había hacer olvidar con un lenguaje más moderno.
Reforzó la derechización de su campaña y su discurso racista en los últimos días. Su programa es contra la Unión Europea, contra la inmigración y específicamente contra la inmigración islamista. Beneficia de la desindustrialización en Francia, (semejante a la de Estados Unidos) y de la resaca antiinmigrante.
El derechista Francois Fillon (Los Republicanos)
Francois Fillon del derechista Partido Republicanos, ganó sorpresivamente las primarias de la derecha frente al favorito Alain Juppé y al ex presidente Nicolás Sarkozy. Es un político de carrera desde fines de los años 70. Fillon ha ocupado todos los puestos electos, desde de consejero municipal, de diputado, hasta de ministro.
Su victoria aparecía asegurada pero un escándalo terminó hundiendo su campaña. Mientras hizo campaña prometiendo la austeridad, la revista satírica Le canard enchaíné denunció el pénelopegate (por el nombre de su esposa).

La denuncia del Canard enchainé, el «penelopegate«, podría costarle la presidencia al derechista Francois Fillon
Francois Fillon usó dinero de la Asamblea nacional pagarle salarios a su esposa y a sus hijos por trabajos ficticios. Un fraude por el cual fue inculpado por los tribunales. Aunque es una práctica usada fraudulentamente por algunos, es algo moralmente indefendible por el candidato de la pretendida austeridad.
A pesar de las críticas Francois Fillon mantuvo su candidatura contra vientos y mareas. En un momento se creyó que la derecha optaría por un candidato de reemplazo. Ahora, según algunas encuestas Fillon podría ser presidente. Beneficiaría de un voto oculto que se manifestaría solamente el día de la primera vuelta presidencial. Si pasa ese escollo, es dado como seguro ganador en un duelo contra Marine Le Pen, en la segunda vuelta.
Es asî como su programa “Proyecto para Francia” basado en la austeridad promete sacar la economía francesa del estancamiento. Promete aumentar la jornada de trabajo en más de las 35 horas de trabajo semanal actuales. Aumentará la edad de jubilación a 65 años. Suprimirá 500 mil puestos de funcionarios públicos. Impondrá una reforma del código del Trabajo que flexibilizará y limitará los derechos de los trabajadores, permitiendo el licenciamiento sin justificación. Se plantea una reforma de la salud.
Jean-Luc Mélenchon, La Francia Insumisa

Jean-Luc Mélenchon de Francia Insumisa
Otra sorpresa de la campaña vino del ex socialista Jean-Luc Mélenchon. Las encuestas le acreditan hasta 19,5%. El podría obtener el voto útil de la izquierda, luego que los socialistas abandonaron su candidato oficial Benoit Hamon.
Jean-Luc Mélenchon fue ministro delegado a la educación bajo el primer ministro Lionel Jospin entre 2000 y 2002. Abandonó el PS en 2008 y desde entonces denuncia la deriva liberal del partido socialista francés. Fue candidato a la presidencial de 2012 por el Frente de Izquierda llegando 4º con cerca de 12% de los votos. Es un excelente orador e introdujo técnicas como los hologramas para multiplicar sus encuentros a distancia en la campaña.

Manuel Valls, primer ministro de François Hollande, apoyó a Emmanuel Macron
Mélenchon milita contra la Unión Europea Neoliberal que traiciona a los trabajadores. Su eslogan es que o se cambia la Unión Europea o la abandonamos. Propone un enfoque de desarrollo económico ecológico. El fijaría un ingreso máximo en 20 veces el ingreso medio; promete la legalización del cannabis. Plantea la salida de Francia de la OTAN. Más de un centenar de economistas de 17 países llamaron a que los franceses voten por el candidato de la Francia Insumisa. La única que permitiría a los cinco desafíos de estos tiempos: cesantía; aumento de las desigualdades; la financiarización de la economía; la crisis climática y; la revisión de tratados europeos liberales.
Su creciente popularidad desató una campaña de miedo en los medios de comunicación de derecha en Francia y en el resto de Europa. Le critican su apoyo a la revolución bolivariana y al chavismo y que trataría de crear una nueva Cuba en Francia.
Resultado incierto
Las elecciones presidenciales en Francia son de gran importancia para el destino de la Unión Europea. Macron, a pesar de su planteo centrista “ni de izquierda ni de derecha” representa la continuidad.
Marine Le Pen, podría ganar la primera vuelta pero en ningún caso la segunda, porque el conjunto de la clase política llamará a votar contra la extrema derecha.
Las sorpresas pueden darla Francois Fillon al calificarse para la segunda vuelta ó más sorprendente Jean-Luc Mélenchon pasa a la segunda vuelta.
Lo cierto es que la que algunos llaman la elección de todas las sorpresas, puede aún ser verdaderamente sorprendente reflejando la profundidad de la crisis de legitimidad de la quinta República.